sábado, 11 de septiembre de 2010

Esa noche

"no me hubieras dejado esa noche"
-café tacuba

No te besé, porque besarte era perderte.
Nadie debería subestimar un beso.
Un beso habría bastado para deshacer mi vida,
para darme cuenta de todo lo que no tengo
y empezar de cero.
Y no empezar de nuevo.
Un beso habría quedado en un beso,
en una noche lo suficientemente larga
cómo para matar recuerdos.
Besarte hubiera sido olvidarte
después de tenerte,
después de encontrarte.

Y dónde quedo yo?
Y dónde quedas tú?

No besarte fue la excusa perfecta para verte.
No cerrar la puerta,
abrir las ventanas de este cuarto,
cada vez más vacío, que soy.
No te besé.
No podía.
Porque besarte significaba, necesariamente,
perderme.

Y dónde quedas tú?
Y dónde quedé yo?