martes, 28 de octubre de 2008

Cuando se vayan todos

De mi diario personal (Gabrielle) 8 Autoexistente/28 de octubre

Hoy tuve el presentimiento de que voy a quedarme inevitablemente sola, al menos por un buen tiempo... a veces Gabrielle creo que voy a recaer, a recaer bien cabrón... cuando nadie esté conmigo, cuando me sienta triste y no haya a quien llamar, cuando fery de nuevo esté lejos en algún lugar.. y yo esté aquí estancada en esta misma ciudad, viendo estas mismas cuatro paredes cuyas sombras y grietas me sé de memoria. Cuando Greta esté estudiando en Barcelona, cuando Denisse se enamore de Mauricio...cuando yo no tenga más que hacer que ejercicio y ahogarme en libros y libros, de economía, de historia, de derecho, novelas, poemas... cuando me tome 15 pastillas de 250mg de ibuprofeno y nadie se entere y a nadie le importe, cuando me vea en el espejo y me grité y me canse de golpearlo y enfrentar la imagen que tanto repudio y que volveré a ver en huesos, en 34 kilos de soledad y vacío en formas de tallas 0. Cuando recuerde que no soy más que yo y estos libros, libros en los que vivo desde que tengo 5 años. No soy pesimista sé que no será así para siempre...pero a veces Gabrielle, me duele saber que los mejores años de mi vida, los pasaré yo sola. Quiero, necesito, deseo aprender a escribir, estudiar letras o cursos de escritura, quiero encontrar la estructura que le falta a mis frases, encontrar el sitio en el que deben ir mis metáforas. Necesito colocarme yo, madurar y que maduren las palabras, que se hagan hermosas...que se hagan hermosas ellas que pueden. Necesito aprender a amarlas más y que ellas aprendan a amarme porque por unos años más sólo nos tendremos mutuamente.

jueves, 16 de octubre de 2008

Ana

A veces me mira desde la ventana, es una sombra en el día, en la noche un fantasma. cuando se recarga en el alfeizar la siento en las rodillas, un temblor indefinidamente melódico que termina de rechinar en los dientes, si la dejo me quiebra y con todo y todo...a veces la dejo. De noche su mirada se reproduce en muecas de una boca torcida y yo sé que se ríe de mí, de mi intento inútil de verme bien, de mi gasto energético y mi disfraz de mujer. Y tiene razón, no soy yo en zapatos de tacón la que se esconde cohibida o la que evita la comida...la que vomita después. Ella se ríe porque sabe que soy y que no soy, porque le gusta sentarse y observar, emitir juicios en el tiempo. Ella es el caos en el orden compulsivo, es la figura que se detiene en sus vaivenes a mirar y gritar, gritar tan fuerte. Yo no puedo simplemente no escuchar, yo no puedo apartarme de su abrazo, ignorar su voz, ni olvidar ese cuerpo del que soy sombra en el día, ni esos ojos que me miran como a un fantasma en la noche, cuando su boca se tuerce y en su mirada perdida a veces reconozco mi propio reflejo.

No hay fin

Tal vez sea simplemente el día, hoy... y ayer, antier y mañana. Tal vez sea simplemente la humedad de una tormenta que se rehusa a caer, o tal vez nada más soy yo.

Me gustaría pensar que en una vida pasada fui un ser bello, estéticamente agradable. Un sauce verde en un valle perfecto, la última flor que resisitío al invierno, una canción de esas que se quedan adentro y se repiten una y otra vez. Pero yo sé que no.

Si no existieran espejos igual lo sentiría, y es que consiste en algo que va más allá de simplemente ver. Se siente la piel pesada, mi cuerpo se pinta en el epitalamo y comprendo mi figura como asquerosamente amorfa. Y siento mi cintura ancha, mis piernas cortas y gordas y mis brazos me estorban. No entenderías hasta no sentirlo, sentir el asco que viene con cada furtiva mirada al espejo, con cada retoque de maquillaje que inutilmente intenta hacerme entender que nunca me veré bien.

Si me pregunto porque, sé que viene más allá de la superficialidad, yo nunca leí revistas de moda... pero la belleza es algo que está ahí, que siempre ha estado ahí para contemplarla y desearle, para que yo no la alcanze nunca.

miércoles, 15 de octubre de 2008

Extracto de mi diario personal

dimanche 12 octobre 2008

Miedo

Gabrielle,

El miedo carcome, moja las calles, se siente en el tiempo, en las horas, los minutos...en cada tic tac del reloj...y sé y temo pero sé. El miedo se apodera de mi a veces y no puedo moverme, ni pensar, ni correr. Son las sombras que corren, es la lluvia que cae ahora de una manera distinta, son velas que se apagan aún con las ventanas cerradas, soy yo... yo que sé.
Es la calma antes de la tormenta, Gabrielle,
algo va a pasar...
El viento me lo ha dicho.

viernes, 10 de octubre de 2008

Cosas

Hay cosas que no deben escribirse para que no sean constantes. Cosas que deben ser del aire para poder respirarlas, para no agotar su existencia...
Entran por los sentidos, recorren la piel de un cuerpo en forma de escalofríos.
Hay cosas que no pueden escribirse mientras permanezcan vivas, que no se plasman en la hoja porque las letras aún siguen vibrando en las manos, en la mente, en el cuerpo.
Y luego hay cosas que aunque se escriban... no se agotan nunca.
Cosas que sí y cosas que no
Cosas que tal vez podrán ser o no
pero que no se escriban, que no se acaben.

jueves, 9 de octubre de 2008

Todavía te Recuerdo

Sí, a veces te recuerdo, de vez en cuando apareces de entre las frases de alguna persona conocida o te veo en los ojos de algún extraño.
Si te preguntas...porque sé que lo haces...
Sí te recuerdo, recuerdo tus manos y recuerdo tu cuerpo, todavía me sé tu nombre completo.

Como olvidar tu risa, la nuestra, las horas y los días de sol o ¿era lluvia? que pasé en tus ojos, aquellos ojos que siempre me vieron con ternura. Para ti fui, fuiste también de mí y entendimos ¿escondimos? sentimientos de esos que se tienen sólo una vez cada determinado tiempo.
Y ahora te escucho, te leo, veo tu carro, siento tu aliento y sí, también me acuerdo del beso, el momento en que el mundo fue nuestro y te dije que no.
No y dolía, no y no cicatriza del todo porque estás, porque eres, porque fuimos y serás el hombre que más me supo cuidar... y te recuerdo segura de que en tus brazos, de que a tu lado no tenía que pensar, no tenía que pelear ni una guerra más... era un algo casi paternal con un deje de deseo y ese prohibido encuentro. De lejos te quise y cuando te tuve cerca te dejé ir, por tí, por mí y por todo lo que implicaba tenerte.
Yo sé que no hice mal, y sé que lo agradeces.
Pero...
Es solo que a veces todavía te recuerdo.

Presente de Otoño

Fue un octubre en que la escuché decirle por primera vez a alguien algo así.
"Te regalo la luna, pero déjala ahí para que todos la vean."
La miró y sus ojos brillaron como no los había visto nunca, después de eso se la dijo a mi padre y volvió a repetirlo varias veces más, nunca me lo dijo a mí. Yo entendí en ese momento que no regalaba la luna en sí, regalaba lo que estaba viendo, le regalaba el sentimiento... le daba la frase y su connotación, era más que un contexto.
Alguna vez leí que las cosas que se tienen, las que se ven y las que se aman pierden sentido cuando no tienes con quien compartirlas, y creo que es así...
Después de ese octubre regalé la luna, y regale la lluvia y el viento, regalé flores, frases, miradas y pedazos de libros.
Después de ese y varios otoños más era inminente que te conociera, que me vieras, que te viera, que leyera tus ojos, que comprendieras mis metáforas y me entendieras así, me quisieras así, a pesar de mí y a pesar de ti y de las circunstancias.
No te ofrezco explicaciones, y tampoco te he dado mi magia... pero sé que puedes sentirla.
No te ofrezco algo concreto, ni te doy mi cuerpo ni te doy mi alma... puedo compartirla.
No te pido más de lo que puedas dar y no necesito más de lo que espero.
Y sin embargo
cuando yo quería la luna tú me has dado el cielo entero.

viernes, 3 de octubre de 2008

Distante

Hay veces que me preocupa tu persona
Que no estés o que estés y no te sientas
Me preocupa que no hablemos o que hablemos y no digamos nada.
Hay momentos y hay lugares en que no te conozco
y me encuentro hablandole a un ser distante
Me pierdo en tus ojos lejos del mundo
y entonces no sé cual de los dos se fue.

Hay veces que me preocupa tu persona
Que no recuerdes o no me acuerde
ni de tu cara ni de tu cuerpo.
Temo que se rompa y se haga polvo,
Que desaparezca, que se pierda o nos perdamos
y no te vuelva a encontrar.

Hay veces que me preocupa tu persona
y como eres conmigo
Hay veces que me preocupa tu persona
y otras me preocupas tú.